Descripción
Vía subterránea nos propone una suerte de viaje órfico por los inframundos externos e internos, sociales e individuales de la cultura contemporánea, con una mirada desprejuiciada, descarnada y vertiginosa que el autor denomina “poesía negra”.
Viaje iniciático y terapéutico que a modo de Divina Comedia “portátil”, nos zambulle en algunos de los oscuros laberintos que, precisamente porque tanto tememos y evitamos, tanto nos definen.
Como libro de viaje, Vía subterránea es una singular “guía turística” por ciudades abisales, templos remotos, regresiones y derivas subconscientes, infratiempos inconfesables, que toma como mentores a María Zambrano, Sófocles, San Juan de la Cruz, Cernuda o Beckett, y nos extravía por ciertas paradojas del pensamiento trágico, en oposición beligerante a las corrientes psicológico-literarias imperantes de la autoayuda cognitiva y la inteligencia emocional.
Poesía negra es libertad de explorar sin temor las negruras de fuera y dentro que determinan nuestra vida, libertad de mirarlas a los ojos, de escucharlas con serenidad aunque derritan nuestro oído. Porque es en la negrura donde yacemos indefensos, sin respuestas, y con el solo vislumbre de algunas preguntas, donde se esconde el misterio de lo que somos.
Poemas como concretas mordeduras, como concretas caricias, como concretos latidos, como concretas memorias musculares archivadas en la biblioteca infinita de nuestra electricidad sanguínea, y traducidas a la biblioteca finita de las palabras.